Una de las consecuencias de la pandemia que estamos viviendo es que muchas personas han tenido la oportunidad de plantearse, durante los meses de confinamiento, si querían pasar los próximos años de sus vidas trabajando en el mismo sitio o en el mismo sector. Como coach, es un honor acompañar estos procesos de reflexión, ya que son un ejercicio de descubrimiento y honestidad hacia uno mismo. Algunos de mis clientes me dicen que llevan años haciendo lo mismo y aunque les gusta, no terminan de sentirse cómodos en el entorno de la oficina. Otras personas intuyen que lo que necesitan es reiventarse y explorar otras profesiones. Bajo mi punto de vista, la confianza en uno mismo es un ingrediente imprescindible tanto para cambiar de empleo como para reinventarte. En este post quisiera contarte cómo tener confianza contigo mismo.
La base sobre la que se construyen muchas cosas
Antes de empezar, déjame decirte que la confianza en uno mismo es un pilar sobre el que se construyen muchísimas cosas. No solo tiene que ver con el entorno laboral sino que se la confianza también es la posibilitadora de las relaciones personales y familiares. En general, una persona con unos buenes niveles de autoconfianza goza de relaciones más saludables, ya que incorpora la asertividad en su día a día siendo honesta consigo misma y con los demás, respetando los derechos propios y ajenos. También la autoconfianza posibilita lograr los propios objetivos: incrementar la confianza en uno mismo posibilita que nos abramos a nuevas alternativas.
Hacia dentro y hacia fuera
Stephen M. R. Covey hace una distinción interesante sobre este tema. Nos habla de la confianza hacia dentro -la confianza en uno mismo- como hacia fuera -la capacidad de inspirar confianza en los demás-. Me parece una apreciación interesante y nos habla de una cierta ecología: cuando trabajas tu autoconfianza, estás incrementando también la confianza que inspiras.
Los cuatro pilares
Según este autor, la confianza se sustenta sobre cuatro pilares. Veamos cuales son:
Integridad: se refiere a la congruencia, a tener la valentía de actuar según los propios criterios, valores y principios. Si pensamos en la confianza hacia fuera, la integridad tiene que ver con cumplir con nuestra palabra y ser humilde.
Intención: son las motivaciones, nuestra conducta, nuestras prioridades. Según Covey, genera confianza la persona que posibilita el acuerdo mútuo y que no busca ganar. Son relaciones posibilitadoras, creadoras de consensos.
Capacidades: talentos, actitudes, conocimientos, nuestro propio estilo. Es importante que puedas saber en qué eres bueno, cuales son tus puntos fuertes, qué es lo que sabes hacer.
Resultados: tiene que ver con celebrar lo que has conseguido hacer, tus éxitos. Reconocernos.
A menudo en sesiones de coaching encuentro a clientes que tienen muy claro lo que no saben hacer, lo que no quieren, lo que no lograron. Y mi trabajo aquí consiste en acompañarles en el proceso de descubrir lo que sí saben hacer, lo que sí quieren, lo que ya han conseguido.
Te propongo una serie de preguntas que espero te sirvan para reflexionar sobre tu nivel de autoconfianza. Procura ser honesto y saca tus propias conclusiones. Imagina a una mesa con cuatro patas, mide el grado de solidez de cada una de ellas:
Integridad:
- ¿Quién estás siendo en estos momentos?
- ¿Qué es lo que da sentido a tu vida?
- ¿Para qué haces lo que haces?
Intención
- ¿Qué es lo que tienes claro y qué es lo que todavía no tienes claro?
- ¿Cuál es tu deseo más profundo?
- ¿Qué es lo que estás construyendo?
Capacidades
- ¿Qué cosas has intentado hacer?
- ¿Hasta cuando vas a seguir haciendo lo mismo?
- Según tus amigos, ¿en qué eres realmente bueno?
Resultados
- ¿Qué es lo que vas a lograr?
- ¿Qué posibilidades ves?
- ¿Para cuando lo vas a tener?
Espero que estas preguntas te ayuden a profundizar un poco más en tu autoconfianza. Será un placer para mí acompañarte en el proceso de mejorar tu confianza.